Los inicios del Patín a Vela fueron puramente de ocio. Siempre ha existido un vínculo muy importante con el antiguo patinador en un principio a remo y, bastante más tarde propulsado a vela.

Después de reiteradas modificaciones hasta el año 1943 que adopta la definición de monotipo, será conocido como Patín a Vela y pasado bastante tiempo se conocerá como Patín Catalán. Sus características básicas son las de catamarán y única embarcación que se gobierna sin orzas ni timón; velas sin sables y ausencia de botavara.  Un sencillo barco de vela ligera que se gobierna desplazando el cuerpo del tripulante sobre la longitud de la cubierta. Lo que más llama la atención es su singularidad, porque en todo el mundo no se conoce nada parecido.

La historia de este singular barco tan vinculada a la existencia de la costa catalana, está documentada y reconocida en actas de junta de la ADIPAV, crónicas de historiadores, boletines del Club Natación Barcelona y otros que reflejan a la vez acuerdos referidos al Patín a Vela.